sábado, 8 de mayo de 2010

First Impressions of Shanghai

Llevo dos días y dos noches en Shanghai. No es mucho tiempo pero da para hacerse algunas ideas respecto a la ciudad. Primero: que si no me han dicho que los chinos son comunistas, nunca lo hubiera descubierto. Por las calles se pasean Audis y BMW, las calles están repletas de Chinos comprando en Best buy, Louis Vuitton y Nike, y el metro está lleno de publicidades digitales de Coca Cola o Loreal. Sólo en una cosa se nota la mano centralizada: en la planificación. Por ejemplo, para salir del aeropuerto tomé un tren ligero, que anda a 350 kms. por hora. Todo bien pero.... había 3 personas en el tren, nada más. Los Chinos tienen objetivos estratégicos, y eso es lo que define sus prioridades, no el mercado: queremos un tren ultrarápido y voila, allí está, no importa que sólo viajen tres personas. Hay ejemplos mejores: en medio de un barrio pujante donde se construían rascacielos me encontré con: un cultivo de arroz, con chinitos con gorros triangulares labrando la tierra. En Chile eso ya lo habrían arrasado, en China hay planes estratégicos: el campo hay que integrarlo a la ciudad. Otra cosa que se hizo para la expo son una cantidad infinita de parques, en todos lados. Se sabe que son nuevos porque los árboles son chiquititos, pero son una cantidad impresionante de parques, en cada esquina. Y claro, para ellos es fácil expropiar (la propiedad es en realidad una concesión) Por lo que lo que se planifica puede desarrollarse con mucha facilidad. Esto puede tener, eso si, algunos problemas: lo que se planifica en una generación puede considerarse un error para la siguiente. Así, en Shanghai hay una ciudad muy moderna pero a la que se le nota la falta de tradición: de templos de pagodas, de pequeñas callejuelas, de lo que uno esperaría encontrarse en China. Y claro, en una época en la que el patrimonio cultural no se consideraba tan importante como el desarrollo económico, se arrasó con muchas cosas (algo similar a lo que ocurre en Santiago, aunque sin planificación) y la ciudad a veces parece no tener arraigo ni identidad. Los barrios tradicionales que quedan son muy comerciales, llenos de tiendas y turistas, y uno se queda echando de menos la China profunda, antigua y tradicional.

No hay comentarios:

Publicar un comentario